miércoles

La palabra
ninguneada
menoscreída
dolorida
tomada
asaltada.

La palabra
enternecida
empobrecida
poblada
ahogada,
caminaba.

La palabra
enmohecida
distorsionada
cambiada
entorpecida.

La palabra
corrompida
nublada
temida
aborrecida,
hablaba.

La palabra
arrebatada
comida
acribillada
retorcida,
anhelaba.

La palabra
arrancada
acartonada
titubeada
no escrita
silenciada,
se asomaba.

La palabra
agazapada,
triturada
perseguida
cansada
explotada,
gritaba,

se desataba,
se desnudaba,

y es canto
y otra vez abrazo,
y es lo que habitamos
y deshabitamos,

y no hay que callarla
ni morderse los labios.
Guy Le Querrec