viernes

Temporada
de verte dormir
boca arriba
boca abajo
sepultada
en algún recoveco
donde te encontrás
a salvo
sin entender
las marcas
los dolores
en tus manos
sin querer
entender
por qué
están
cada una
recordándote
algo
que había que olvidar.

Annelies de Mey

Que la sangre
sea de fuego
sea de puñal,
que la primavera
tan solo fue un pañuelo,
que mañana
no te vengan a decir
cuánto se puede querer.

Benoit Courti